Hidróxido de sodio
Soda cáustica
NaOH
Sólido blanquecino, fácilmente soluble en agua.
Coproducido en la electrólisis del cloruro de sodio, junto con el cloro y el hidrógeno, en una solución acuosa, en el denominado proceso cloro-alcalino.
Ajuste del pH, producción de biodiésel a partir de aceites vegetales, limpieza de botellas, flotación (industria de pulpa y papel), extracción de alúmina (industria del aluminio), mercerización del algodón (industria textil), curtido de cuero, pelado de verduras, fabricación de productos químicos (uso intermedio), resinas regeneradoras o agua suavizante. Los consumidores lo utilizan para pelar metales o destapar tuberías.
Hay evidencias de su uso en civilizaciones antiguas, como la egipcia, que naturalmente desconocían de qué se trataba. La identificación científica tuvo lugar en 1807, tras el descubrimiento del elemento sodio por Humphrey Davy.
A granel, en concentraciones del 32% y el 50%.